Home / Noticias / Creo que el rock de este país casi no tiene diferencias con el rock inglés

Creo que el rock de este país casi no tiene diferencias con el rock inglés

Ciro Fogliatta, histórico tecladista que integró bandas fundamentales como Los Gatos, Polifemo, Espíritu, Sacramento y los Desconocidos de Siempre, entre otras, sostuvo que el rock argentino es “un subgénero” del rock mundial “por el desarrollo de su lenguaje”, y destacó “su continuidad” y su crecimiento al que comparó con “una gran bola de nieve”. Con un nuevo disco recién editado, al que tituló al igual que su corte de difusión “Pido demasiado”, el histórico músico rosarino demostró que continúa en la senda del blues que demostró a lo largo de toda su faceta como solista, más allá de la impronta que le imprimió a las bandas que integró.

“Siempre me llamó mucho la atención la continuidad del rock argentino, es algo que no ha parado desde que empezó y se fue haciendo una gran bola de nieve, con todos sus aciertos y errores. El rock argentino se desarrolló casi al mismo tiempo que el rock inglés. Casi no hay diferencia y tiene un nivel muy grande. Por el desarrollo de su lenguaje, siempre digo que el rock argentino es un subgénero del rock mundial”, dijo Fogliatta en diálogo con Télam.

En una extensa charla con esta agencia, Fogliatta habló sobre su nuevo disco, destacó la importancia de trabajar con productores, recordó sus experiencias en Estados Unidos y España, y explicó por qué prefiere tocar con gente más joven.

¿Cómo nació la idea de este disco?

—Empecé a pensar en este disco cuando terminé de grabar un disco anterior “El rey del Rock and Roll”, en 2013. De hecho, ahora mismo ya estoy pensando en canciones nuevas. Al poco tiempo empecé a hacer los demos que, en realidad, si no se hubiera armado esta movida de grabar con productores, se hubieran convertido en el disco. Se dio esta posibilidad, con dos productores prestigiosos como Alfredo (Toth) y Guyot y eso me ayudó a redondear una producción más importante que la que tenía pensada.

¿Cómo le resulta trabajar con productores con tantos años de trayectoria y, en este caso, con alguien que fue compañero suyo como Toth en Los Gatos?

—Es cierto que con Alfredo coincidimos en algunas viviencias. A mí me interesa mucho tener productores porque, desde la época de Los Gatos, siempre me pareció que era un eslabón que faltaba. Muchos colegas de mi edad no están de acuerdo, pero yo creo que suma. Nosotros, a veces, creemos que lo sabemos todo y no es así. Siempre se puede aprender. Siempre pueden salir cosas nuevas.

¿Prefiere tocar con gente más joven o prefiere hacerlo con artistas de su edad?

—Prefiero trabajar con los más jóvenes y no perder la amistad con los más viejos (risas). He tenido problemas para trabajar con gente de mi edad porque somos muy parecidos. Ya estamos todos muy formados, así que prefiero tocar con gente más joven.

¿Se siente cómodo como solista?

—Más o menos. Ahora me acostumbré. Siempre fui músico de banda pero cuando sos más grande ya cuesta mucho. Es más fácil cuando sos joven, que formás un grupo con amigos o compañeros de la escuela, como me pasó a mí en Rosario.

¿Buscó transmitir algo con el título del disco?

—Con la canción, sí. El título del disco surge cuando terminás de grabar y te ponés a mirar las canciones del álbum. Me pareció que era la más fuerte. Esa canción es como una sátira, como la tapa del disco, y la letra dice eso, que quiero todo. Mi manera de escribir tiene mi humor, un poco ácido. Creo que soy un entretenedor, no creo que esté grabando el concierto para piano en La Menor de Schumann. Son canciones que están buenas, cuando mejor salgan, mejor, y si puede tener una onda la letra, mejor aún. Aquí hay algunas letras que me parece que están bien.

Es protagonista desde los inicios del rock argentino, tuvo la oportunidad de ser testigo de la escena de Nueva York en 1969 y de la movida madrileña de los 80. ¿Cómo ve al movimiento local?

—En Nueva York estuve un año porque necesitaba ese contraste con lo que pasaba acá. Era habitué del Filmore East, en donde vi a The Who, The Mothers of Invention, Chuck Berry, The Kinks, Humble Pie, Albert King y Procul Harum, entre otros. Pero lo que más me impresionó fue Jimi Hendrix en el Madison Square Garden. Siempre me llamó mucho la continuidad del rock argentino, es algo que no ha parado desde que empezó y se fue haciendo una gran bola de nieve, con todos sus aciertos y errores. El rock argentino se desarrolló casi al mismo tiempo que el rock inglés. Casi no hay diferencia y tiene un nivel muy grande. Por el desarrollo de su lenguaje, siempre digo que el rock argentino es un subgénero del rock mundial. Ahora, las bandas tienen un gran prestigio, hay una proyección internacional muy grande. (LaCapital)

link

QUE TE PARECIÓ LA NOTICIA