Compuesto por nueve canciones originales y una versión del clásico “Ámbar Violeta” de Fito Páez, el álbum nace del duelo por la pérdida de su padre, un hecho que despertó en el músico la necesidad de indagar en la historia de sus antepasados.
“Los Ancestros es un disco conceptual que parte de una experiencia personal, pero busca responder preguntas universales sobre la vida y la muerte”, explica Mantel, compositor, cantante y guitarrista. A lo largo del álbum, la idea de la trascendencia y el legado familiar se materializa en una orfebrería musical que combina elementos del rock, el folklore latinoamericano, el pop y la música académica.
Producido por Mantel junto a Juanito El Cantor, el proceso de grabación fluyó de manera orgánica, sin maquetas previas, permitiendo que cada canción encontrara su propia forma. “Trabajamos con los instrumentos que teníamos a mano, hasta que decidimos sumar a otros músicos en sesiones especiales”, cuenta el artista. Entre los colaboradores del disco destacan Chancha Vía Circuito, La Lá (Perú), Ampersan (México), Lucy Patané, y Candelaria Zamar, entre otros.
El arte de tapa, una imagen de los bisabuelos de Mantel tomada en Turquía hace más de un siglo, fue intervenida por Valentina Mantel, sobrina del músico, y la artista Violeta Krasuk. La foto representa el misterio y la cercanía de una herencia que Mantel busca entender a través de su música.
Con más de dos décadas de carrera, Lucio Mantel sigue consolidándose como una de las voces más originales de la escena musical argentina, con una obra que trasciende géneros y fronteras. Los Ancestros es un disco profundo y luminoso que, a pesar de su origen en el duelo, encuentra en la música una forma de conexión y continuidad.